-21 kg
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Después
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¿Por qué querías adelgazar?
Desde que tengo uso de razón, siempre he tenido muchos cambios de peso. Lo máximo que he llegado a pesar han sido 73 kilos y fue durante el embarazo. Sin embargo, siempre he conseguido mantener mi peso en un nivel más o menos tolerable. Hace unos años, me tuvieron que extirpar el útero. Después de la operación, empecé a subir de peso de manera constante. Por supuesto, probé un montón de dietas, como la de comer un día y al siguiente no, o eliminar por completo el consumo de carbohidratos. Nada de eso me funcionó, al menos a largo plazo. Yo le echaba la culpa de todo a la menopausia, que empezó antes debido a la operación y al hecho de que no era capaz de controlar mis cambios hormonales.
"Con YAZIO, es superfácil adelgazar y mantener tu peso. Estoy segura de que es una solución a largo plazo."
Lo cierto es que ya me había rendido. No quería ni ver fotos mías y empecé a buscar ropa de tallas grandes por Internet. Según mi IMC, ¡ya era obesa! Ese fue el punto más bajo en el que he estado, o podría decirse que fue mi punto más alto porque llegué a pesar 76 kilos.
A principios de este año, empecé un curso de nutrición que aseguraba que era posible perder peso a través de la alimentación. No estaba muy motivada, pero me inscribí en el curso. Al fin y al cabo, las cosas no podían ponerse peor de lo que ya estaban. Lo que yo no sabía y lo que nunca podría haberme imaginado es que ese curso iba a ser el comienzo de mi nueva vida.
¿Qué querías conseguir con tu cambio?
Ya me había sometido a 3 operaciones de rodilla y me seguía doliendo al subir escaleras o bajar una pendiente. Sabía que estaba relacionado con mi sobrepeso y con el hecho de que no hacía ejercicio. Ya tampoco era capaz de subirme a mi caballo sin ayuda, algo bastante triste para una jinete. Lo único que quería era poder volver a ponerme la ropa que me gustaba y ser capaz de ignorar los anuncios sobre pérdida de peso sin remordimientos.
¿Cómo alcanzaste tus objetivos?
Mi proceso de pérdida de peso me enseñó lo importante que es comer con regularidad, preferiblemente 3 veces al día. También me recomendaron evitar los aperitivos o los dulces por la tarde. Siguiendo una dieta basada en la pirámide nutricional que todos conocemos, podía proporcionarle a mi cuerpo los macronutrientes esenciales (proteínas, carbohidratos y grasas) que necesita.
Si me apetecía algo dulce, podía comérmelo en una de mis 3 comidas. De esta manera, prevenía los antojos y no tenía la sensación de estar privándome de nada. Por supuesto, tuve que dejar de hacer ciertas cosas, como comer patatas fritas mientras veía la tele, lo que suponía ingerir un montón de calorías sin darme cuenta. Si me apetece comerme un puñado de patatas fritas o un trozo de chocolate, me lo como después de la cena y así me quito el antojo.
Consejos de Petra
Ve fijándote pequeñas metas y prémiate cuando las alcances.
Para asegurarte de que tu pérdida de peso sea duradera, evita comer demasiado poco.
Bebe mucha agua, come mucha verdura y consume los 3 macronutrientes de forma regular para evitar los antojos.
Empieza con 2 o 3 cambios sostenibles que puedas incorporar de manera constante en tu rutina diaria. Si introduces demasiados cambios, te agobiarás.
Concédete un capricho de vez en cuando sin sentirte culpable.
En enero, también empecé a ir al gimnasio 2 veces a la semana. Combinaba 45 minutos de cardio con entrenamiento de fuerza en las máquinas. Tuve que dejar de ir al gimnasio en marzo debido al coronavirus. Para compensarlo, encontré una app con la que podía hacer una gran variedad de entrenamientos de cualquier nivel directamente desde casa.
Al principio, pensaba que con el coronavirus no iba a conseguir adelgazar, pero poco después me di cuenta de que estar 12 semanas trabajando desde casa, sin que me invitaran a ningún lado y sin la posibilidad de salir a comer podía ser muy beneficioso para mi cuerpo. De repente, tenía mucho más tiempo para mí misma y mis entrenamientos, y logré fácilmente entrenar 6 veces a la semana. Concentrarme en mi dieta y cocinar de manera saludable fue el comienzo de cambios muy sostenibles en mi vida.
¿Cómo te ayudó YAZIO?
Por supuesto, también hubo días en los que mi familia quería comer comidas caseras tradicionales. Empezaron a surgirme muchas dudas relacionadas con mi dieta. ¿Cómo encajaría en mi plan el cerdo asado con beicon o un filete de pollo empanado? ¿Estoy muy por encima de mi límite de calorías? Empecé a comer menos, para no echar a perder todo mi progreso. Hubo un momento en el que mi peso se estancó y podía hacer lo que quisiera (o mejor dicho, comer tan poco como quisiera) y mi peso se mantenía estable).
Descubrí YAZIO a través de una recomendación de Facebook. Decidí descargarme la app, sobre todo por las fantásticas recetas que ofrecía. Gracias a YAZIO, me di cuenta de que estaba comiendo muy por debajo de mi metabolismo basal y, por lo tanto, lo que estaba consiguiendo era ralentizar mi metabolismo. Entonces, descubrí que comer algo frito para cenar podía encajar en mi objetivo de calorías o que no iba a pasar nada por comerme una onza de chocolate más. Fui ganando confianza poco a poco y, a través de YAZIO, me di cuenta de que podía disfrutar de las cosas con moderación. Incluso mi marido empezó a preguntarme cuántas calorías tenían algunos alimentos y aprendió a disfrutar más de la comida sin sentirse culpable.
¿Tuviste algún contratiempo?
Cuando llegué a mi peso objetivo de 55 kilos, cambié mi objetivo de YAZIO a "mantener peso", reduje mis entrenamientos a 3 veces por semana y solo hacía un seguimiento aleatorio de mis calorías.
En seguida me di cuenta de que me había precipitado. Empecé a recuperar peso y me frustré muchísimo. Entonces, volví a cambiar mi comportamiento y ahora practico ejercicio 4 veces a la semana y hago un seguimiento de mis calorías de manera muy constante. Estoy muy contenta porque ahora sí estoy consiguiendo mantener mi peso deseado.
¿Qué consejos tienes para otros usuarios?
No dudes en enviarme cualquier pregunta que tengas. Estoy encantada de poder ayudar a los demás con mi experiencia. Un último consejo: tanto si quieres perder 15 kilos como si quieres perder 50, te recomiendo que te vayas fijando pequeñas metas hasta llegar a tu objetivo final.
Escribe en un papel cuál será su recompensa, mételo en un sobre y guárdalo en un sitio donde lo veas a menudo. Cuando, por ejemplo, hayas bajado de los 100 kilos o hayas perdido 5 kilos más, prémiate con una tarde de cine o un día de spa. Abre el sobre cuando hayas alcanzado tu objetivo y disfruta de tu recompensa. De esta manera, podrás asegurarte de que tus pequeños logros provoquen grandes cambios.
¿Qué objetivos tienes para el futuro?
Después de alcanzar mi peso objetivo, mi próxima meta es no volver a recuperar los kilos perdidos. Como ya he dicho antes, YAZIO me ayuda a saber cuánto puedo comer sin tener remordimientos de conciencia, sobre todo con alimentos que no son del todo saludables. Otro de mis objetivos es tonificar mi cuerpo, especialmente el estómago y los muslos. Y si pierdo algunos kilos más durante el proceso, mejor que mejor.
¿Por qué quieres contar tu historia?
Gracias a mi "nuevo" cuerpo y a la confianza que tengo en mí misma, mucha gente siente curiosidad y me pregunta que cómo lo he conseguido. He descubierto que hay muchas personas que no están contentas consigo mismas y que quieren cambiar esa situación. Si eres lo suficientemente constante y paciente, te resultará fácil conseguirlo. Me hace muy feliz poder transmitir estos conocimientos y ayudar a otras personas a mejorar su autoestima.
