¿Por qué querías adelgazar?
Comencé mi viaje de pérdida de peso a mediados de febrero. El primer día, me subí a la báscula y puede que esa fuese perfectamente la primera vez que lo hacía en 20 años. Me quedé con la boca abierta: ¡180,6 kilos! Sabía que había ido ganando peso a lo largo de los años porque a los veintitantos estaba mucho más delgado. ¡Pero no esperaba ver el número que vi!
"Nada es imposible. Si quieres hacerlo, ¡tú también puedes conseguirlo!"
Con el paso de los años, empecé a no encontrarme bien físicamente. Sentía que me faltaba el aire después de dar un pequeño paseo, tenía problemas en las rodillas que podían acabar en cirugía, hipertensión, gota e incluso problemas para ponerme los calcetines en mi día a día. Tenía que hacer algo si quería ver crecer a mis hijos y futuros nietos. También quería poder disfrutar de la vida al máximo y apoyar a mi equipo, y no solo desde el banquillo.
¿Qué querías conseguir con tu cambio?
Quería mejorar mi forma física y estar sano. Quería sentirme mejor conmigo mismo y disfrutar más de la vida. Quería poder jugar con mis futuros nietos e ir a trabajar como cualquier otra persona.
¿Cómo alcanzaste tus objetivos?
Lo primero que hice fue cambiar mi dieta y empezar a comer más verdura, fruta, productos integrales y carne blanca. También distribuía mis raciones de una manera muy diferente. En lugar de patatas fritas y chocolate, comía fruta fresca y solo bebía agua, té o café. También empecé a hacer ayuno intermitente 16:8. Cuando estaba en pleno cambio de mi dieta, no me prohibí ningún alimento. Considero que es importante divertirse de vez en cuando, así que tampoco dejé de tomarme una o dos cervezas en el club deportivo.
Consejos de Lars
También comencé a salir a andar entre 20 y 30 minutos. Al principio hacía varios descansos, pero poco a poco dejé de necesitarlos. Empecé a notar avance bastante rápido. Cuando perdí los primeros kilos, comencé a darme cuenta de todo lo que podía conseguir aún. Si hacía mal tiempo, andaba o trotaba en el sitio en casa. Al principio hacía 1 kilómetro y ahora corro alrededor de 6-7 kilómetros. Además, empecé a montar en bicicleta y, actualmente, me hago unos 30-40 kilómetros. También hago entrenamiento de fuerza y, cuando llueve, lo sustituyo por la bici de spinning o la elíptica.
¿Cómo te ayudó YAZIO?
Descubrí YAZIO en enero del año pasado y adquirí la versión PRO inmediatamente. ¡YAZIO puede convertirse en tu gran aliado! Aprendí muchísimo sobre alimentación, especialmente sobre cómo contar calorías correctamente. Me pareció divertido y me di cuenta de lo mucho que podía ofrecerme la app, así que ahora la uso a diario. El grupo de Facebook también tiene consejos, historias y recetas estupendas de otros usuarios, y todo ello me ayudó a alcanzar mi objetivo. Gracias a YAZIO, he perdido 83 kilos hasta ahora, sin cirugías ni ninguna otra ayuda.
¿Tuviste algún contratiempo?
Por supuesto, también tenía contratiempos que me bajaban el ánimo o me desmotivaban, pero no me duraban demasiado. Me iba sintiendo cada vez mejor con cada pequeño logro.
¿Qué consejos tienes para otros usuarios?
Tienes que tener claro todo lo que podría mejorar. Por ejemplo, tu actitud ante la vida, con las relaciones y, especialmente, con tu salud. Es importante que empieces poco a poco y te vayas poniendo metas pequeñas. No te presiones demasiado ni dejes que los demás te presionen. No olvides nunca que lo estás haciendo por ti y por nadie más. ¡Es tu vida!
¿Qué objetivos tienes para el futuro?
He bajado de los 100 kilos y sé que voy a conseguir bajar de los 93. Después, seguiré manteniendo mi peso y trabajando para desarrollar músculo mediante el entrenamiento de fuerza.
¿Por qué quieres contar tu historia?
Me encantaría animar y motivar a otras personas. ¡Todo el mundo puede hacerlo y merece la pena! Si echas la vista atrás, no siempre eres consciente de todo lo que has conseguido realmente. Es como empezar una misión sin conocer el objetivo inicial.
Creo que me llevará su tiempo, pero sé que ha sido la decisión o la "misión" correcta para mí y que la he completado con éxito. Todo el mundo debería tener la oportunidad de decirse a sí mismo: "¡Misión cumplida!"